31 enero, 2006

Cuando más lo necesitan

Cuentan quienes les vieron crecer que ya desde sus orígenes se venían arrastrando en círculos concéntricos, hoy sus pasos siguen el descenso en picado sin hallar fondo sobre el que descansar… juegan de la mano con los escasos rayos de un sol de invernadero, y un viento que les acaricia y hace reír se enreda en sus cuerpos y los mantiene aún junto a esas nubes que llueven recuerdos en las tardes-noches de un mes de enero, donde no cabe consuelo para los compartidos olvidos de sus memorias en compañía de largos vasos de alcohol.

Tras un cristal, contemplan esos rostros que los miran desde el fondo del reflejo de un charco, esbozan una leve mueca y sonríen saludando a quienes son capaces de verlos por dentro y arroparlos cada noche que vagan por las calles con la esperanza de encontrar un abrazo henchido de puro calor.

Sus marchitos ojos cadenciosamente deciden cerrarse pero ni aún así logran confundirse entre las sombras para esquivar la pesada carga que su pesar les regala, y cada día les llega arrancando del alma todo resquicio de esperanza e ilusión, la mañana les arroja fuera del bar donde el frío aguarda y las gentes recién acicaladas pasean a sus hijos asquerosamente repeinados en la mañana del domingo... mientras ellos; abrazafarolas del tres al cuarto, buscadores de quimeras imposibles, vanas sombras en la niebla... dan pasos en falso, se levantan para de nuevo volver a caer en las garras de ese ave decadente y enfermiza de impronunciable nombre...

Y los echan de tascas por montar líos cuando sus demonios les impiden encontrar la paz y descanso precisos, se retiran en soledad encerrados con todo cuanto arrastran bajo sus pasos y sobre sus hombros, conocen los dogmas y poderes que desde antiguas civilizaciones rigen los actos de las gentes, tras sus duras miradas se encuentran puros corazones, y así paso a paso, despedida a despedida, gota a gota, golpe a golpe, polvo a polvo, gramo a gramo, lágrima a lágrima, gramo a gramo... sus sueños se relegan a esos lejanos lugares que jamás alcanzarán, la niebla se cierne sobre ellos como la noche que hace vidas comenzó... y aún sabiendo que no hay remedio cabal para sus sentimientos e impulsos, van desgranando los restos de vida que les queden por apurar... y el viento... ese viento gélido sigue sus pasos cual tormenta de verano que quiere recordarles cercano el final...

Etiquetas:

04 enero, 2006

Respuestas concretas, palabras exactas

Lentamente, sus ojos se iban cerrando al compás de la suave sinfonía de una conocida canción y su respiración se tornaba a cada segundo más lenta y relajada al abrigo y sopor de la calefacción de su cuarto. Fue entonces cuando ella apareció ante sus ojos, se quedó sorprendido, pero al punto comprendió de quién era esa voz que entre sueños le hablaba de respuestas concretas y exactas palabras que no se encuentran en maya; respuestas concretas que traerán el amor le decía ella. Ambos albergan en su corazón el mismo deseo; felicidad y prosperidad para todos, dos hermanos que entienden en sus mapas a la madre naturaleza, por eso hacen planos conceptuales y caminan entre ellos, entienden el mundo, la totalidad. Él es pragmático puro y ella es intuición pura. Las horas se tornaban segundos mientras ella le hablaba de “ese mundo” con árboles, donde al amor brotaba libre y alado, sincero y vivo. Poco después ella se despidió del mismo modo que había llegado, ya había liberado su karma y de nuevo se hacía bruma ante sus ojos que no perdían detalle, por segundos se iba evaporando pero él no la codiciaba, no la codicia.
Se despertó sobresaltado por el sonido del teléfono, pero se sentía tan abrumado que no se levantó a contestar la llamada, se quedó recostado en la cama recordando lo importante de cada palabra que ella, entre sueños, le había susurrado al oído. No temas y conviértete en samurai, le había dicho. En aquel momento se dio cuenta que en su mano derecha tenía un papel arrugado en el cuál alguien había escrito el siguiente mensaje; -Vuelve a los libros, no te olvides del significado de tu segundo nombre, acepta tu karma y libérate de la ira y la codicia…
Y comprendió que nada de ello había sido un sueño, desde ese día siguió el camino en busca de su segundo nombre, ella a veces aparece entre sus sueños junto a la mariposa y el jaguar, le brinda su abrigo, y en el cielo constelado una estrella sigue cuidando y abrigando cada paso que ambos dan, una estrella que comparten y les guía. Allá donde ella se encuentre le acompañarán los mejores deseos de él.

Etiquetas: